El 2020 fue un año difícil para el mundo entero. Las restricciones impuestas por la pandemia llevaron a desarrollar nuevas dinámicas en casi todas las esferas de la vida. El mundo de la cultura no estuvo exento de ellas. Sin embargo, no por el confinamiento los procesos creativos y artísticos cesaron.
En Cuba, por ejemplo, la postura institucional asumió el desafío de mantener la vida cultural durante 2020 en medio de la pandemia.
Según la valoración del ministro de Cultura cubano, Alpidio Alonso Grau, “el 2020 fue un año extraordinario en muchos sentidos, pero lejos de amilanarse el movimiento artístico cubano se creció”.
“Creo que la COVID-19 sacó lo mejor de nuestra gente. Se desató una ola de creatividad extraordinaria. La Cultura se movió de escenario. Pasamos a las redes sociales, al mundo virtual”, comentó.
Fue un año en el que el directivo afirma que las prácticas culturales sintonizaron con nuevas audiencias, rompieron viejos esquemas de trabajo, cambiaron conceptos de trabajo y se implementaron nuevas formas de hacer.
Se trabajó a partir del programa de desarrollo cultural y de la estrategia de desarrollo económico, indicó el titular del ramo.
En la isla caribeña la cultura está subvencionada por el gobierno por lo que la política de financiamiento a los proyectos artísticos se posiciona como medida de protección a los artistas.
Financiamiento a proyectos artísticos
En el año 2020, el Ministerio de Cultura de Cuba entregó financiamiento a 112 proyectos. En tanto, se realizaron dos convocatorias del Fondo de Fomento del Cine Cubano, a las que se presentaron 128 proyectos y resultaron premiados 23 en la primera, e igual número en la segunda.
Se financiaron, también, por otras vías, más de 200 conciertos transmitidos por streaming, 112 videoclips, seis documentales, 568 teleclases y más de 700 cápsulas con mensajes de bien público. En total, más de 1 500 audiovisuales durante 2020.
Según explicó, Alonso Grau se potenció la creación de materiales audiovisuales sobre temas patrióticos, vinculados con la Historia de Cuba y las mejores tradiciones.
Por otra parte, acotó,se continúa trabajando en las inversiones. Entre las obras que son objetos del plan de inversiones, figuran: la sede del Ballet Nacional de Cuba y una nueva sala de lectura infantil y juvenil en la Biblioteca Nacional José Martí, que llevará el nombre del escritor cubano Eliseo Diego.
Protección salarial
Varios proyectos con carácter multimedial pretende concretar en este 2021 el Ministerio de Cultura de Cuba.
De acuerdo a la explicación del funcionario se perfila la creación de una web Tv que deberá ver la luz próximamente, con ocho horas de transmisión diaria.
Además, está prevista la edición de un material informativo con miles de películas, animados, conciertos, discos, libros digitales, que van a entregar a las bibliotecas públicas, a las escuelas de arte y a diferentes instituciones culturales en el país.
Asimismo se prevé el crecimiento de las editoriales, particularmente Cubaliteraria, en términos de producción de ebooks.
Por otra parte, destacó el dato de que, hasta hoy, más de 21 mil músicos profesionales en el sector y unos seis mil artistas escénicos han recibido una protección salarial, en calidad de ayuda del Estado antes estas nuevas condiciones laborales.
“Al proteger los salarios de los que trabajan en el sector presupuestado y los que lo hacen para el mercado, estamos protegiendo tanto lo más contemporáneo, lo más indagador como lo más popular”, refirió el viceministro del ramo Fernando Rojas.
Apuesta multimedial y principales eventos realizados
En ese sentido, Rojas repasó algunos de los principales eventos que tuvieron lugar en 2020: “Pudimos hacer la Feria Internacional del Libro de La Habana, dedicada a Vietnam. Después en marzo, tuvimos que empezar a reconvertirnos hacia estos ejercicios por vías digitales, pero así, por ejemplo, se participó en un grupo de actividades organizadas por la Unesco y otras organizaciones internacionales”.
A ello se incorporaron otros eventos artísticos como el Concierto por Cuba, organizado por el Instituto Cubano de la Música y el Hot House de Chicago, y las ediciones virtuales de ferias del libro de varios países, donde Cuba participó en distintos espacios digitales.
Casa de las Américas también pudo realizar homenajes, de manera alternativa, a figuras como los escritores Roberto Fernández Retamar y Eduardo Galeano.
Se realizaron actividades durante el verano y la Jornada por la Cultura cubana, manteniendo las normas sanitarias y el distanciamiento físico, lo cual también hizo posible la entrega, en actos presenciales, de los premios nacionales en las distintas manifestaciones artísticas.
La actual situación epidemiológica de la isla tampoco permite la realización de eventos en vivo, por lo que tanto festivales, como encuentros, conciertos y conferencias continúan realizándose online, una manera diferente de interactuar con el público pero que permite la supervivencia del movimiento y la creatividad de los artistas.