A menudo, los artistas dicen que se retiran, van al campo, se encierran en su estudio, en su oficina para estar tranquilos y pensar cuando quieren producir una o más obras. ¿Se puede asimilar el confinamiento que actualmente viven miles de millones de personas en todos los continentes a causa de la epidemia de Covid-19 a este momento particular que aplican los artistas? Quizás. El hecho es que desde el comienzo de estos días de encierro en casa, las redes sociales (en particular WhatsApp, Facebook o Twitter) están inundadas de vídeos y fotos de todo tipo creados por profesionales de la imagen, pero también por muchos aficionados
Estos materiales audiovisuales se refieren a diversos temas. Por ejemplo, el famoso leitmotif “Quédense en casa” es muy utilizado. Los internautas, ya sean anónimos o celebres, actúan con cierto talento para demostrar que la casa sigue siendo la única medicina contra este virus, por el momento.
Otro tema dan la felicidad a los videastas: las relaciones entre hombres y mujeres. Es cierto que muchas parejas casadas nunca han pasado tanto tiempo juntas en una vivienda y bajo la fuerza. Incluso durante la luna de miel, dejan la cámara nupcial… Así que las mujeres son acusadas de “aburren” a sus maridos al hablar como viejos aparatos de radio, algunos incluso ven que crecen sus oídos… También se señala la supuesta gran pereza de algunos hombres cuando se trata de tareas domésticas. Confinada, la especie masculina se ve obligada a hacer un esfuerzo, pero a menudo con mucha torpeza… Afortunadamente, esta “guerra” entre los dos sexos se trata con mucho humor.
Por otra parte, Guadalupe y Martinica, que tienen como tradición degustar platos a base de cangrejos para Pascua, no podrán este año por el confinamiento y el crustáceo baila de alegría en un video…
Los videos en todos los idiomas circulan por el planeta – WhatApps sigue siendo la red más utilizada – con un solo objetivo: hacer reír a la gente, hacer que este momento sea más soportable, y funciona. Cabe señalar que incluso en período de huracanes en las islas del Caribe, el confinamiento nunca ha sido tan largo…
Un tema más importante también están encendiendo el cerebro: la máscara. Este pedacito de tela que pasaba casi desapercibido hoy hace fantasear a todo el globo porque frena la propagación de la enfermedad. Sin embargo, en casi todos los hospitales no hay hasta tal punto que los representantes de los Estados van a China (que se ha convertido en el mayor taller del mundo) en la pista de los aeropuertos para librarse una batalla con maletas de billetes de banco y llevar la carga…escenas dignas de películas con la mafia como protagonista.
Para atender a esta escasez, la “pequeña gente” que también quieren protegerse de una nueva enfermedad que los médicos no conocen perfectamente recurren a montones de imaginación para hacer máscaras y viseras con materiales simples (botella de refresco, pedazo de tela, pañuelo, calzoncillos…toallas sanitarias, etc.). Filmarse con su teléfono móvil y compartir sus creaciones en las redes sociales es mostrar solidaridad. Finalmente, lo digital que muchos temían se ha convertido en una medicina para los pueblos.
Así pues, este período de confinamiento nos permite constatar que en cada uno de nosotros duerme un artista y, si las circunstancias no fueran tan dramáticas, premios podrían recompensar las mejores creaciones en cada categoría… Estos genios creativos son capaces no sólo entretener a miles de millones de personas – y aún no sabemos si tendrán secuelas psicológicas de este encierro inédito – sino también encontrar soluciones ingeniosas para detener esta pandemia de coronavirus.
Éste es también el instinto de supervivencia…