Cuando el 17 de diciembre de 2014 los presidentes Raúl Castro y Barack Obama anunciaban simultáneamente el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, rotas desde hacía más de medio siglo, se abría un nuevo capítulo en la historia de ambos países.
Lo acontecido conmocionó a amplios sectores de la comunidad nacional e internacional, a la vez que cambió abruptamente los términos y la posición de Cuba en el mundo. Por primera vez en el siglo XXI la isla caribeña se sentaba en la mesa de negociaciones, en términos de igualdad, con el país más poderoso del mundo. Aunque, eso sí, sin admitir la pérdida de su soberanía, ni renunciar a sus principios de justicia social y con el reclamo inmediato del levantamiento del bloqueo económico y comercial impuesto por EE.UU hace más de cincuenta años.
El comienzo del largo proceso tuvo sus primeros pasos concretos con la exclusión de Cuba de la lista de “Estados patrocinadores del terrorismo internacional”; luego la apertura de las embajadas en ambos países, el 20 de julio de 2015 ; y, finalmente, con la histórica visita de Obama a Cuba, en marzo pasado.
A la sazón, en los últimos dos años se incrementaron los viajes a Cuba de ciudadanos estadounidenses (más de 163 000 en 2015) y los intercambios culturales, científicos, académicos y deportivos entre ambos países. Según datos ofrecidos a la prensa cubana por Josefina Vidal, diplomática cubana y Directora general para Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, al cierre de 2015, se habían realizado más de 1300 acciones de intercambios entre entidades cubanas y contrapartes estadounidenses, para un 43% de crecimiento en relación con 2014.No obstante, los retos entre ambas naciones siguen siendo grandes y complicados.
Visitas con el rostro descubierto
El deshielo de las relaciones trajo aparejado un amplio posicionamiento del tema “Cuba” en la agenda mediática internacional. Aunque la isla ya era popular entre europeos y canadienses como un destino turístico de playa de bajo costo, ahora Cuba vive un auge por el aumento de los visitantes estadounidenses.
A la par, comenzó a llegar una pléyade de estrellas con la esperanza de conocer un país sometido a muchas décadas de dificultades, aislamiento y confrontación, que supuestamente se abría ante el mundo o viceversa.
Cuba, de repente, era noticia. Fotos de las calles de la Habana inundaron las redes sociales y los titulares de las llamadas revistas del corazón por las personalidades que en ellas aparecían. Hemos de aclarar que hace algún tiempo la visita de un famoso del mundo del espectáculo era un acontecimiento inusual —como fue la vista de Beyonce y Jay-Z en 2013— y las pocas figuras que venían lo hacían en viajes privados y de máxima discreción, alejados de cualquier cobertura mediática.
Pero hoy ya nadie se esconde cuando pisa la Habana.
Entre las primeras en aterrizar estuvo la socialité Paris Hilton, heredera del imperio hotelero, quien acudió al XVII Festival Internacional del Habano junto a la modelo Naomi Campbell, que en otras ocasiones había visitado Cuba. Luego la cantante barbadense Rihanna encendió la vía pública con una candente y sensual sesión de fotos (posó desnuda), realizada por Annie Leibovitz para Vanity Fair.
Artistas a veces inadvertidos
A finales de octubre pasado, la californiana Katy Perry recorrió varias instalaciones de La Habana. Una semana antes, Mick Jagger visitaba por primera vez la isla y tanteaba el terreno para lo que después sería el histórico concierto de los Rolling Stones.
Aprovecharon también el deshielo el campeón del mundo de boxeo Floyd Mayweather, y los cantantes Jon Bon Jovi y Usher, quien contrajo nupcias en la isla en 2015 y luego regresó como parte de la delegación del Comité Presidencial para las Artes y las Humanidades de Estados Unidos.
En esta amplia comitiva presidencial que visitó Cuba llegaron igualmente la influyente productora teatral, Margo Lion; William “Smokey” Robinson, fundador de la célebre disquera Motown Records ; el vocalista, guitarrista y compositor Dave Matthews, líder de la banda de rock Dave Matthews Band ; el violinista Joshua Bell ; el actor y productor Kal Penn ; y la directora artística del Ballet de Miami, Lourdes López ; entre otras personalidades.
Invitados por el Festival Internacional de Cine Latinoamericano y la Escuela de Cine compartieron con cineastas cubanos el actor Ethan Hawke y el director Francis Ford Coppola. Mientras, Robert de Niro, Zoe Saldaña y el comediante estadounidense Conan O’Brien vinieron a cenar en el famoso restaurante La Guarida y a recorrer centros nocturnos. O´Brien, además, emitió el primer Late Night estadounidense grabado en la isla en más de medio siglo.
Por supuesto, en esta nutrida lista de la constelación de la industria cultural no podía faltar la mediática familia Kardashian. Aunque el paso por la isla de Kim, Khloe y Kourtney y la filmación de un capítulo de su reality pasó desapercibida y a casi nadie le importó.
Estrellas interesantes
En este corto tiempo, los cubanos han disfrutado también conciertos de artistas consagrados de otras partes del mundo como el pianista chino Lang Lang, la cantante portuguesa Dulce Pontes, la boricua Olga Tañón, y el dominicano Johnny Ventura.
Sin embargo, de los espectáculos más sonados en la capital cubana estuvieron los conciertos de la banda The Dead Daisies, en febrero del 2015 ; Dj Diplo, en la Tribuna Antiimperialista; y la legendaria presentación de sus majestades satánicas The Rolling Stones, en marzo pasado.
Los Stones reunieron a cientos de miles de fanáticos no solo de Cuba, sino de todo el mundo. Durante más de dos horas Las Piedras Rodantes hicieron delirar a una multitud enardecida que vivió al máximo un sueño convertido en realidad.
La banda realizó un recorrido por los clásicos de su repertorio, en el que no faltaron las míticas “Satisfaction” y “Sympathy for the Devil”, junto a otros clásicos como “Start Me Up”, “Paint it”, “Black y Brown Sugar”.
El concierto gratuito, que puso punto final a la gira Olé Tour, fue realizado en la Ciudad Deportiva y para todos fue un momento histórico, que sin dudas abrirá las puertas para que lleguen a La Habana otras grandes bandas.
Más recientemente, la capital fue escenario de la filmación del capítulo final de la comedia de Showtime, House of Lies ; y de las últimas entregas de las taquilleras sagas Transformers y Rápido y Furioso.
La filmación de esta última película revolucionó a media ciudad con el cierre de varias calles, lo cual le acarreó no pocos detractores. Para otros, en cambio, fue una diversión y revelación total poder ser testigos del aparataje tecnológico hollywoodense, así como saludar y tomarse fotos con los actores Vin Diesel y Michelle Rodríguez.
La búsqueda de justicia social
Sin embargo, si hubo un acontecimiento que puso a Cuba definitivamente de moda fue la presentación de la nueva colección Crucero de Chanel. El diseñador alemán Karl Lagerfeld, director creativo de la casa de alta costura europea y uno de los íconos de la moda actual, escogió la isla como la primera localización de Latinoamérica para realizar el desfile al aire libre y montar una exposición suya con más de 200 fotografías sobre moda, arquitectura y paisajes.
El último de los grandes shows de la “apertura” tuvo lugar en el Paseo del Prado de La Habana y se produjo un día después de que llegara a La Habana el primer crucero procedente de EE.UU. en más de 50 años. Por supuesto que la prestigiosa casa de moda francesa atrajo a celebridades como la supermodelo brasileña Gisele Bundchen, y la actriz británica Tilda Swinton.
Pero el derroche de glamour de Chanel en el país caribeño no se centró solo en los diseños del vestuario, el espectáculo fue una puesta en escena: se alquilaron más de 150 “almendrones”, antiguos carros americanos de las décadas del ´30, ´40 y del ´50 que todavía circulan en Cuba y se cerró el Prado habanero y sus calles aledañas, hecho que molestó a muchos cubanos, que ni de lejos pudieron ver el desfile. Porque digámoslo claro, el desfile inspirado en los colores de Cuba y realizado en Cuba no fue ni remotamente para los cubanos.
Todavía en este largo proceso de apertura, falta encontrar el equilibrio entre lo que queremos y nos interesa ver y disfrutar como pueblo. Dicho está desde el principio: sin renunciar a nuestros principios de justicia social.
La tendencia a acercarse a Cuba, conocerla y vivirla al máximo no va a mermar tan rápidamente. Si bien al comienzo muchos pensaron que era solo algo pasajero, fruto de las circunstancias, la realidad de hoy indica que cada vez serán más famosos los que vendrán y no solo atraídos por lo novedoso de lo desconocido, sino también motivados por el riquísimo acervo cultural de la isla e interesados en tener una franca colaboración de retroalimentación.
Mientras se terminan estas líneas, Cuba se prepara para participar en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro con una amplia delegación de atletas, que lucirá por primera vez en la historia del deporte cubano un vestuario diseñado por el famoso diseñador francés Christian Louboutin.
Y como si todo esto pareciera poco, la realeza del Pop también quiso celebrar en la “isla bonita”. Pues sí, la mismísima Madonna llegó a La Habana para celebrar su cumpleaños 58. Vino junto a sus hijos, de los cuales la mayor, Lourdes León, es fruto de su relación con el preparador físico cubano Carlos León. La Reina vino, bailó y gozó en La Vitrola, un bar del Centro Histórico de La Habana. Caminó por las calles de la Habana Vieja y se hospedó en el Hotel Saratoga, frente al Capitolio cubano.
Sí, definitivamente, Cuba está de moda.
Fotos
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Concierto de Los Rolling Stones en La Habana
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Usher en la Universidad de las Artes, junto a miembros del Comité Presidencial para las Artes y las Humanidades de Estados Unidos en abril pasado
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La californiana Katy Perry en la sede de la Compañía Infantil La Colmenita
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Francis Ford Coppola en la Escuela Internacional de Cine y televisión de San Antonio de los Baños
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Jon Bon Jovi en la Fábrica de Arte de la Habana
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Olga Tañón, la cantante puertorriqueña, en su concierto en la Tribuna Antiimperialista en el malecón habanero
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Dave Mathews, cantante y guitarrista del Dave Matthews Band