Durante su discurso del lunes 12 de julio, a las 8:00 de la noche, el presidente de la República, Emmanuel Macron, anunció una serie de medidas destinadas a contrarrestar la muy contagiosa variante Delta, entre las que se encuentra la ampliación del “Pass sanitaire” (Pase sanitario), que será obligatorio en todos los lugares de ocio y cultura a partir de este miércoles 21 de julio.
En vigor desde el pasado mes de junio y reservado a los grandes eventos que acogen a más de 1.000 personas, a los estadios y a las discotecas (más de 50 personas), el “Pass sanitaire” es ahora (casi) inevitable. En efecto, a partir de hoy, miércoles 21 de julio, se exigirá sistemáticamente en la entrada de varios recintos culturales – teatros, cines, museos, conciertos, festivales, centros de ocio – en toda Francia, incluso si el evento se celebra al aire libre.
A partir de agosto, será obligatorio entrar en cafeterías, bares, restaurantes (incluidas las terrazas), centros comerciales, trenes, aviones, autobuses para viajes largos, así como en establecimientos médicos y residencias de ancianos.
La pregunta que muchos se hacen todavía es : ¿cómo puedo conseguir este pase? Hay tres maneras de obtener este documento en papel o digital.
La primera es haber sido vacunado completamente con las dos dosis durante al menos dos semanas. En Francia, se expide un certificado de vacunación que puede utilizarse como “Pass sanitaire” a toda persona vacunada contra la Covid-19 ; está disponible mediante un código QR en la aplicación TousAntiCovid o puede descargarse del sitio web Ameli.fr.
La segunda es haber realizado una prueba PCR o antigénica que haya sido negativa durante menos de 48 horas o 72 horas.
La tercera es tener la prueba de que estuvo previamente enfermo de Covid-19, entre seis meses y dos semanas atrás, es decir, presentar un certificado de recuperación de Covid-19.
Otra novedad muy importante es que la “Pass sanitaire” también será necesaria para los niños mayores de 12 años. Sin embargo, durante las grandes vacaciones escolares de julio y agosto, las normas para los jóvenes de 12 a 18 años se suavizarán.
El “Pass sanitaire” reemplaza el “Passeport vaccinal” (Pasaporte vacunal) que se había mencionado para permitir la reapertura de lugares culturales y que había creado polémica entre los profesionales del sector. Este nuevo mecanismo parece más flexible que el anterior porque no obliga a vacunarse ; además del certificado de vacunación, también acepta el certificado de prueba negativa y el certificado de inmunidad. Esto no impide que algunos crean que el objetivo final de este “Pass sanitaire” es hacer obligatoria la vacuna. El primer paso es que a partir del próximo mes de octubre, las pruebas PCR y antigénicas ya no serán gratuitas, sino que costarán alrededor de 50 euros y 30 euros respectivamente y serán reembolsadas por el Seguro médico…
En este primer día de aplicación de la ley, algunos centros de ocio de Guadalupe intentan evitarla respetando únicamente la capacidad establecida de antemano y afirman no tener competencia para controlar este famoso “Pass sanitaire”… En Francia, los promotores de grandes festivales culturales que acogen a miles de espectadores o visitantes aprueban más bien esta nueva medida y piensan que es la única manera de reanudar sus actividades profesionales.
A principios de septiembre, sabremos si el “Pass sanitario” ha frenado o no la frecuentación de los lugares culturales.
Francia no es el único país que aplica este dispositivo para intentar reanudar una vida normal, ya que Dinamarca tiene su “Coronapass” e Israel su “Pasaporte Verde”.