Por primera vez, Cuba implementó un fondo de producción para estimular la creación cinematográfica en los realizadores de la isla.
La primera y segunda convocatorias del Fondo de Fomento Cinematográfico fueron anunciadas en los meses de mayo y junio, respectivamente, por el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (Icaic).
El concurso fue un reclamo largamente anhelado por la comunidad cinematográfica, que desde hace años reclama un concurso de este tipo que pusiera en igualdad de posibilidades los propuestas de todos los realizadores cubanos.
La implementación del Fondo surgió a partir del Decreto-Ley 373/2019 del Creador Audiovisual y Cinematográfico Independiente, que proporcionó el soporte legal a esa actividad artística en Cuba.
Dicho decreto reconoce la condición laboral del creador audiovisual y cinematográfico independiente y de él surge el Registro del Creador Audiovisual y Cinematográfico Independiente, que oficializa la capacidad legal de los creadores ante el Estado.
De hecho, la condición requerida para participar en el Fondo de Fomento es pertenecer al Registro del Creador Audiovisual y Cinematográfico o Literario.
¿En qué consiste el Fondo?
El Consejo de Ministros de Cuba tomó un acuerdo para crear el Fondo de Fomento para el Cine Cubano, con ingresos principales del presupuesto del Estado.
Los montos financieros – provenientes, en primer lugar, del presupuesto que destina el Estado cubano para la cultura, aunque se reconocen otras fuentes, como las donaciones – que sean asignados, tras la selección que el comité haga entre los proyectos presentados, harán posible la creación de obras.
La primera convocatoria, que culminó el 10 de julio pasado, presentó varias modalidades : escritura de guion de proyectos de largometraje de ficción, documental y animación ; desarrollo de proyectos de largometraje de ficción, documental y animación; y postproducción de proyectos de largometraje de ficción, documental y animación.
Mientras, la segunda convocatoria se abrió en las categorías : cortometrajes de ficción, documental y animación; largometrajes de ficción, documental y animación en producción de proyectos y ópera prima.
Kariculture conversó con dos jóvenes guionistas cubanas, graduadas de la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños. Ambas participan en el concurso con varios proyectos de largometrajes y guion.
¿Qué expectativas tienen los jóvenes realizadores con el fondo?
Nuri Gutiérrez y Laura Conyedo tienen las expectativas altas con este concurso “no solo porque es la posibilidad real de ver sus proyectos hechos realidad”, sino porque lo ven como un estímulo para la creación audiovisual en Cuba.
Nuri, quien tiene un largometraje en producción en República Dominicana pero no en su país, piensa que el mecanismo que antes existía a nadie le parecía justo porque no era lo habitual para cualquier institución de cine.
“Normalmente en cada país existe un mecanismo de concurso y en Cuba se logró ahora que una convocatoria coloque a todos en igualdad de condiciones, por eso es tan importante. El Fondo da una igualdad de posibilidades a los realizadores cubanos y no solo para jóvenes, da igualdad de condiciones para todo el que quiera filmar”, dice.
Agrega : “En mi caso, soy optimista y lo bueno es que se supone que cada año exista esta opción, pues antes había que buscar fondos internacionales. Estoy concursando junto con Alan González (también guionista) en dos categorías. Tenemos un proyecto en guion que por el momento se llama “Bestiario” y la ópera prima “La mujer salvaje”.
Por su parte, Laura concursa en la sección “Proyectos en desarrollo” con dos largometrajes de ficción : “El regresado”, en coautoría con Armando Capó, Premio Coral de ópera prima del pasado Festival de cine de La Habana ; y “Los Caídos” junto con el director Damián Sainz. Asegura que “el Fondo es un estimulo a los proyectos de realizadores jóvenes, pues existe independientemente de las producciones anuales del Icaic”.
Además, piensa que el mero hecho de poder litigar con otros proyectos fomenta la calidad de lo que vendría siendo el nuevo cine cubano y está segura de que la competencia va a subir la parada porque hay muchos proyectos buenos que están engavetados y que finalmente pueden empezar a exhibirse.
“El Fondo no es más que una buena noticia para que pueda seguir existiendo un cine joven en Cuba”, afirma.
